La organización de las elecciones del próximo 2 de junio en Nuevo León enfrenta un desafío significativo debido a la renuncia de un 45% de los ciudadanos previamente designados como funcionarios de casilla. Según datos del Instituto Nacional Electoral (INE), se requieren 66,996 ciudadanos para operar las 7,444 casillas, lo que implica la participación de un presidente, dos secretarios, tres escrutadores y tres suplentes generales por cada una. Sin embargo, hasta la fecha, 30,148 personas han declinado su participación.
Olga Alicia Castro, Vocal Ejecutiva de la Junta Local del INE en Nuevo León, informó que estas deserciones han sido particularmente frecuentes en Monterrey, San Pedro y Escobedo, desde que comenzaron los nombramientos. Castro explicó que muchos ciudadanos, después de aceptar inicialmente, posteriormente informaron que les había surgido algún inconveniente que les impedía participar en el proceso electoral, que incluye la elección de Presidente, Alcaldías, Senadurías y Diputaciones locales y federales.
Para abordar esta situación, el INE está utilizando su lista de reserva de electores insaculados por sección electoral. Sin embargo, en algunos casos, esta lista ya se ha agotado, lo que ha obligado a invitar a ciudadanos de la Lista Nominal, quienes no fueron inicialmente seleccionados para ser funcionarios de casilla.
“Ya habían aceptado, les llevamos el nombramiento, y hubo renuncias,” señaló Castro. “Hemos estado haciendo las sustituciones y, en su caso, concluiríamos hasta un día antes de la jornada.”
Castro aseguró que, a pesar de las dificultades, aún hay tiempo para realizar los reemplazos necesarios y que es preferible gestionar estas renuncias ahora en lugar de enfrentarse a ausencias el día de la elección, lo que complicaría más el proceso.
“Es mejor que desde ahorita nos avisen si tienen un inconveniente para poder acudir, porque estamos a tiempo de sustituirlos,” añadió. “Porque ya durante la jornada es mucho más difícil llevar a cabo estas acciones.”
En el caso de que el día de la elección no se presenten uno o varios de los convocados, se recurrirá a los suplentes generales. Si esto no es suficiente para completar los cargos requeridos, se invitará a las personas que están en fila para votar a integrarse como funcionarios de casilla.
Esta situación subraya la importancia de la participación ciudadana en el proceso electoral y el desafío que representa garantizar la correcta operación de las casillas en un contexto de renuncias significativas. El INE continúa trabajando para asegurar que todas las casillas estén debidamente atendidas el día de las elecciones, en un esfuerzo por mantener la integridad y la eficiencia del proceso democrático en Nuevo León.