Un trágico incidente sacudió a Eslovaquia la mañana de este martes cuando el primer ministro Robert Fico fue víctima de un intento de asesinato. El atentado tuvo lugar en el centro de Bratislava, cerca del edificio del gobierno, mientras Fico se dirigía a una reunión oficial.

Según informes preliminares, el ataque ocurrió alrededor de las 9:00 a.m. hora local. Fico, acompañado por su equipo de seguridad, fue emboscado por un hombre armado que abrió fuego desde un vehículo en movimiento. Aunque el primer ministro resultó ileso gracias a la rápida reacción de sus guardaespaldas, dos de sus escoltas sufrieron heridas de bala y fueron trasladados de inmediato al hospital. Se encuentran en condición estable, según los reportes médicos.

El agresor fue detenido en el lugar de los hechos tras un breve intercambio de disparos con las fuerzas de seguridad. Las autoridades han confirmado que el atacante es un ciudadano eslovaco con antecedentes penales, pero aún se desconocen los motivos exactos detrás del ataque. Se ha iniciado una investigación exhaustiva para esclarecer si el agresor actuó solo o si hay otros involucrados.

En una declaración oficial, el ministro del Interior, Roman Mikulec, aseguró que se tomarán todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad del primer ministro y de los funcionarios del gobierno. «Este atentado es un ataque no solo contra el primer ministro, sino contra la democracia y la estabilidad de nuestro país. No cederemos ante el miedo y la violencia», afirmó Mikulec.

El intento de asesinato ha generado una ola de condena tanto a nivel nacional como internacional. Líderes mundiales han expresado su solidaridad con Fico y el pueblo eslovaco. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, manifestó en un comunicado su «más profunda condena a este acto de violencia» y reiteró el compromiso de la Unión Europea con la seguridad y la democracia en Eslovaquia.

Robert Fico, conocido por su firme postura política y su larga trayectoria en la vida pública eslovaca, ha sido una figura polarizadora en la política del país. Tras el atentado, se dirigió a la nación en un mensaje televisado, agradeciendo el apoyo y prometiendo que continuará trabajando por el bienestar de Eslovaquia. «No nos dejaremos intimidar por actos de terrorismo. Seguiremos adelante con nuestro compromiso de servir al pueblo eslovaco y de mantener la paz y la seguridad en nuestro país», declaró Fico con determinación.

La seguridad en Bratislava ha sido reforzada significativamente tras el ataque, con un aumento visible de la presencia policial y militar en las calles y en puntos estratégicos de la ciudad. Se espera que las autoridades proporcionen más información a medida que avance la investigación.

Este intento de asesinato pone de relieve la creciente tensión política en la región y subraya la necesidad de medidas de seguridad más estrictas para proteger a los líderes democráticos de ataques violentos. La comunidad internacional sigue de cerca los desarrollos en Eslovaquia, esperando que el país pueda superar este momento de crisis con fortaleza y unidad.

Por Staff

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