En las instalaciones del Tribunal de Justicia del Estado de Morelos, donde hoy se elige al próximo magistrado presidente, se estaría fraguando una intentona de bombazo para evitar la sesión prevista para las 18:00 horas.
Esta falsa amenaza respondería a la intención de Rubén Jasso Díaz, magistrado presidente, de mantenerse en el cargo por otro periodo. Jasso Díaz teme no poder perpetuarse debido a que tiene muy claro que no cuenta con el apoyo del cuerpo colegiado, además que, de hacerlo incurriría en un acto fuera de la Constitución de Morelos.
En una aparente desesperación, el titular del TSJ del estado estaría buscando una situación extrema para evitar la orden del día y tener tiempo para buscar una alternativa que le garantice su reelección.
Jasso Díaz, sin posibilidades legales reelección
El magistrado presidente no está en posibilidad de una reelección, ya que está próximo a cumplir 14 años en el cargo, plazo máximo estipulado en la legislación estatal.
Pero aun en el caso de verse favorecido por sus homólogos, si Jasso Díaz aceptara quedarse al frente del Tribunal estaría incumpliendo el requisito de elegibilidad.
En tanto que, sus votantes, quedarían sujetos a la posibilidad de un juicio político.Una agravante más en su contra es que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) lo investiga por presunto enriquecimiento ilícito, en la cual también están implicados su padre y esposa.Ambos, enfrentan acusaciones por tráfico de influencias y casos de conflicto de interés.
A dónde se inclina la balanza
Las preferencias para elegir al futuro titular del Tribunal Superior de Justicia están en favor de los magistrados Luis Jorge Gamboa Olea, quien lidera las preferencias, y Francisco Hurtado Delgado.
No obstante, las evidentes presiones provenientes de personas ajenas al TSJ sin importar la anticonstitucionalidad del hecho.